Las luces son tenues, los aromas a vino y rosas impregnan el aire, y la música es lenta y sensual. Los bailarines en la pista suben y bajan, se deslizan hacia adelante y hacia atrás, cuerpos muy juntos. Esto no es rumba. Esto es bolero. Y es hermoso.
Más común en las competiciones que en las fiestas, el bolero rítmico americano combina el movimiento contracorporal del tango, el ascenso y descenso del cuerpo del vals y el movimiento de cadera cubano de la rumba. Los pasos son fluidos, los movimientos de brazos expresivos y se baila con música lenta. Es, en mi opinión, el baile rítmico más hermoso. Pero ¿de dónde proviene?
Como ocurre con muchos bailes, no proviene de un solo lugar. El bolero se originó en dos países distintos con dos estilos distintos: España a finales del siglo XVIII y Cuba a finales del siglo XIX.
En España, el bolero surgió de la fusión del fandango, las sevillanas y la contradanza. El fandango era (en una variante) un baile de cortejo que giraba en torno a la historia de una mujer que inicialmente rechazaba a su pretendiente y lo llevaba a una alegre persecución. Las parejas nunca se tocaban. Usaban castañuelas y bailaban al ritmo del flamenco y la música folclórica, y el baile se caracterizaba por el zapateo, las palmas y el chasquido de dedos. Las sevillanas también eran bailes folclóricos similares al flamenco. Los bailarines también usaban castañuelas y se acompañaban de guitarra. Hasta mediados del siglo XX, las canciones sevillanas trataban principalmente sobre la vida cotidiana, pero evolucionaron para incluir «religión, regiones, amor, historias bíblicas y festividades» (1). La contradanza es la forma española e hispanoamericana de la contradanza. Para este tipo de baile, no se necesita pareja. Se forman dos filas y un animador llama a las figuras de baile y se baila con quien se tiene enfrente, moviéndose a lo largo de la fila. Este tipo de danza se observa en las tradiciones irlandesa, escocesa y francocanadiense. Se atribuye a Sebastiano Carezo (2) la combinación de estos elementos, su fusión con el ballet clásico y la invención del bolero.
Bolero español:
El bolero cubano, aunque sigue centrándose en el amor, es más relajado que su homólogo español y recibió influencias de los estilos afrocubanos, que incluían el uso de congas y claves. El primer bolero cubano se atribuye a José “Pepe” Sánchez a finales del siglo XIX y se llama “Tristezas” (3). A diferencia del bolero español, el bolero cubano utiliza un compás de 2/4 o 4/4 en lugar de 3/4. Es este compás de 4/4 el que se ha traducido al bolero rítmico. También se aprecia el movimiento de caderas que se ve en la rumba (4) y otros bailes cubanos, y las parejas bailan juntas. La sensación del bolero cubano es la de un sueño viviente, donde los bailarines se estiran y se deslizan con la música como si fueran una extensión de ella.
La versión cubana del baile se extendió por Latinoamérica, México y Estados Unidos, ganando popularidad. Al llegar al salón norteamericano, se fusionó con el vals, el tango y la rumba, convirtiéndose en el baile que vemos en las pistas de competición.
A la rumba se le suele llamar la danza del amor... al igual que al bolero, con su movimiento fluido e íntimo. ¿Cuál es tu favorito?
Te dejo que adivines el mío. Pista: es el tema de este artículo.
Nos vemos en el suelo.
Bolero rítmico americano:
Notas:(1) Arte español.
(2) Ibíd.
(3) Academia de baile de salón.
Fuentes:
Bolero. http://www.ballroomdanceacademy.com/the-dances/descriptions-of-dances/bolero-2/
Bolero. http://www.rounddancing.net/dance/articles/guest/nelsonkb/bolerorumbawithdifference.html
Bolero. http://www.spanish-art.org/spanish-dance-bolero.html .
Bolero. http://www.umich.edu/~ac213/student_projects06/dorir/bolero.html